DESCUBRE MÁS SOBRE CODEROOMS FLORENCIA
¡Coderooms Florencia es mucho más que una casa de huéspedes!
Cuando fundamos Coderooms, lo hicimos con la creencia de que quienes viajan, sin importar el motivo, merecían algo mejor.
De hecho, creemos que además del alojamiento tradicional, cada uno necesita un espacio estimulante para encontrar su propio camino, realizar su potencial o simplemente cultivar un sueño.
Así surgió el mundo Code, dando vida a un espacio moderno y único que atrae a viajeros, nómadas digitales y todos los espíritus curiosos.
En nuestros espacios damos la bienvenida a todo tipo de viajeros, huéspedes y visitantes en cada etapa de sus vidas, de mente brillante y abierta, a quienes les encanta descubrir cosas nuevas y hacer preguntas.
A esto nos referimos cuando hablamos de un espíritu joven y curioso.
Nuestros huéspedes provienen de los lugares más dispares y esto ha permitido que Coderooms evolucione hasta convertirse en un espacio de vanguardia donde reside una verdadera comunidad interconectada.
Los fundadores
Dum différtur, transcurrit vida!
Nos pasamos la vida haciendo planes, afirmando saber exactamente qué sucederá en el futuro, como si realmente pudiéramos saberlo, sin darnos cuenta de que la vida es en realidad una gran incógnita, donde conviven la racionalidad y la irracionalidad. Y, atrapados en la ansiedad de querer poseer tanto el tiempo como el espacio, olvidamos lo que significa vivir el momento.
Confiamos al mañana lo que deseamos hoy, hacemos sacrificios por este futuro misterioso que ni siquiera sabemos cómo será, si nos hará felices, si nos decepcionará. No podemos saberlo, pero lo creemos firmemente.
Nos engañamos pensando que, al hacer esto, algún día seremos recompensados con todo lo que siempre hemos querido hacer, tener.
Pero, como decía el sabio Séneca, “Dum differtur, vita transcurrit” (Mientras se pospone, la vida pasa) y nos encontramos adultos, sin esa fuerza que nos hacía capaces de todo, cansados. Y esos sueños, esas esperanzas juveniles son ahora sólo aviones de papel que nunca despegarán.
Y sabes por que?
Porque ya no es su momento, porque han cambiado muchas cosas y nosotros mismos hemos cambiado.
Por eso te decimos: ¡vive hoy!
Porque es muy cierto que "La vida es lo que te pasa mientras estás ocupado haciendo otros planes".
Si seguimos dando más valor al mañana que al hoy, no estaremos satisfechos con esta vida, siempre pospondremos lo que puede hacernos felices, sólo porque habíamos previsto algo más en nuestro plan de vida. Pero la cuestión es que esta vida es tan sorprendente y terriblemente impredecible que no vale la pena confiar en un concepto tan frágil como el mañana.
El tiempo es ahora.
Y bastaría entender esto para vivir mejor día tras día. Pero somos seres finitos que siempre tendemos hacia el infinito, ¿qué podemos saber? Sólo nos damos cuenta realmente de esto cuando perdemos a un ser querido. Es en ese momento que entendemos que el sentido de la vida no está en el mañana, sino en esos 1140 minutos que nos regalan cada día. Si hubiéramos entendido esto antes, nuestras vidas habrían sido diferentes.
Pero todavía hay tiempo para cambiar las cosas, para creer que la felicidad es posible, a pesar de todo, para aprovechar de verdad el momento, para vivir.
Gera y Felice